Desde hace una semana, la situación en Guinea
Ecuatorial es muy crítica para los automovilistas ecuatoguineanos que deseen
aprovisionarse en las estaciones de servicio del país.
La penuria es general y los empleados de las estaciones
de servicio han tenido que racionar su producto entre sus clientes para
preservar sus reservas. Un verdadero colmo para este país que es el 3er productor
de petróleo de África subsahariana.
La razón de esta penuria sería debido a un fallo de
Gepetrol, la empresa nacional, cuyas estaciones de servicio estarían secas,
mientras que desde el principio del año, la empresa francesa Total habría hecho
una fuerte reducción de sus importaciones de carburante. Según ciertas fuentes,
Guinea Ecuatorial debería sumas importantes a Total y desde hace casi 8 meses,
las facturas no se han pagado…
Según el periódico digital «Diario Rombe», una de las
numerosas razones de esta crisis es que Gabriel Mbega Obiang Lima (ministro de Industria,
Minas y Petróleo) habría vendido a diversas compañías petroleras (rusas,
chinas, etc.) acciones ya concedidas a los franceses…», constituyendo así sumas
importantes que él habría colocado, según esta fuente, «en paraísos fiscales del
mundo entero»…
Ayer miércoles, en el pabellón presidencial del
aeropuerto de Malabo, Teodoro Obiang Nguema Mbasogo dio una conferencia de prensa
urgente a propósito de la penuria de carburante que paraliza al país. En esta
conferencia de prensa, Teodoro Obiang Nguema Mbasogo hace totalmente
responsable a TOTAL, la compañía francesa «que tiene el monopolio de la distribución
en Guinea Ecuatorial» (lo que es en parte inexacto, ya que nuestra soberanía».
Apelando al «nacionalismo» de los ecuatoguineanos, insistió en la necesidad de hacer
un bloque («como una piña») frente a las dificultades presentes: «Debemos estar
unidos para no dejarse llevar las maniobras de aquellos que aceptan
difícilmente la condición de la independencia de los africanos.»
El presidente calificó esta situación de «estrategia» de
la compañía francesa «orquestada con el objeto de provocar la agitación social
en Guinea Ecuatorial». Según él, «este y otros planes de desestabilización contra
la Guinea Ecuatorial que han sido abortados por nuestro gobierno ponen en
evidencia que ciertos países y ciertas organizaciones y empresas vean con malos
ojos la emergencia de Guinea Ecuatorial en el marco del programa Horizonte 2020…
»
El pasado martes, el mismo ministro de información,
Agustín Nze Nfumu, declaró en las ondas de la TVGE que «el gobierno de Guinea Ecuatorial
apela a la población a estar vigilante…, sabemos que podemos contar con el
apoyo del pueblo que nos ayudará a desenmascarar los oscuros designios de
Francia, que intenta desestabilizar y colonizar nuestro
país…»
El presidente Obiang declaró que «Guinea Ecuatorial no
debe nada a Total y que no se va a tolerar ese chantaje », añadiendo que la
actitud de la compañía va contra su propio interés: «Nuestro país puede dirigirse
a otras multinacionales para garantizar la venta de carburantes». Recordó
también que la empresa francesa «ha realizado desde varios decenios de enormes
beneficios», concluyendo su discurso con una amenaza apenas velada: «Somos
soberanos y podemos expulsar a todas las empresas que no quieran participar a la
emergencia de Guinea Ecuatorial, para asociarnos con otras empresas que se
interesen en este objetivo».
Total se implantó en Guinea Ecuatorial en 1984,
adquiriendo el 50% del capital de la empresa pública EPGE (empresa Petrolífera
de Guinea Ecuatorial). «Expulsada» de la exploración y de la explotación del petróleo,
el grupo francés se posicionó en quasi-monopolio en el segmento de la
importación y de la distribución de carburantes creando una nueva empresa mixta
llamada GETOTAL. En diciembre de 1998, el Estado ecuatoguineano se retiró del
capital de GETotal, aceptando la privatización de la cadena de distribución del
petróleo con la compra por Total de los terminales de Bata et Malabo,
instalaciones de almacenamiento y estaciones de servicio.
Sin embargo, hace 2 años, la compañía francesa ha visto
cuestionado su monopolio en la distribución de gasolina y de gasoil en el
territorio ecuatoguineano, la empresa nacional Gepetrol habiendo sido autorizada
por el gobierno ecuatoguineano a crear sus propias estaciones de servicio.