viernes, 31 de diciembre de 2010

España admitió a EE.UU. que las elecciones en Guinea Ecuatorial de 2008 fueron una ¨oportunidad perdida¨

Un cable diplomático filtrado por WikiLeaks afirma que el Gobierno español aseguró, pese a ello, que los comicios habían sido un «paso más» hacia la democracia. ABC

Día 29/12/2010 - 12.40h1 comentarios


El Gobierno español reconoció en junio de 2008 durante un encuentro con las autoridades militares norteamericanas que las elecciones legislativas celebradas el mes anterior en Guinea Ecuatorial habían sido una "oportunidad perdida", según revela un cable diplomático confidencial filtrado por el portal WikiLeaks.

El Ministerio de Asuntos Exteriores y de Cooperación, cuyo titular era por entonces Miguel Angel Moratinos, no se pronunció oficialmente sobre los comicios hasta varios meses más tarde de su celebración, y únicamente para afirmar ante una pregunta parlamentaria que las elecciones habían sido un "paso más en el proceso de democratización" y que se habían registrado "mejoras palpables".

El Gobierno entregó a Obiang una lista de 27 presos para excarcelarlos

Según León, el Gobierno español estaba intentando convencer al régimen de Teodoro Obiang Nguema para que llevara a cabo reformas democráticas y había entregado a Malabo una lista de 27 presos políticos que debían ser excarcelados, "la mayoría de los cuales ya habían sido liberados" en las fechas de esta entrevista. Asimismo, explicó que Guinea Ecuatorial es un país que cuenta con buenas oportunidades para el progreso gracias a sus recursos naturales y que España mantenía una buena cooperación con su antigua colonia, aunque advirtió de que ambos países deberían "lanzar un mensaje a favor de la democracia".


Las elecciones y la respuesta parlamentaria

Las elecciones legislativas del 4 de mayo de 2008 dieron la victoria al Partido Democrático de Guinea Ecuatorial (PDGE), la formación del presidente Teodoro Obiang Nguema, que se hizo con 99 de los cien escaños del Parlamento. El asiento restante fue para Convergencia para la Democracia Social (CPDS, partido integrante de la Internacional Socialista, al igual que el PSOE), que posteriormente denunció que los comicios habían estado "plagados de irregularidades" y habían supuesto "un paso atrás en el proceso político" y un "abuso de poder de una dictadura sin escrúpulos".

El Gobierno español no emitió por entonces ningún comunicado tras los comicios, pese a ser una práctica habitual, y no se pronunció por escrito y de forma oficial hasta meses más tarde, tal como publicó a principios de diciembre de 2008. En aquella ocasión, en respuesta a una pregunta parlamentaria de la diputada Rosa Díez -de UPyD-, el Ejecutivo español afirmó que las elecciones ecuatoguineanas habían sido "un paso más en el proceso de democratización del país" y que se habían registrado "mejoras palpables" respecto a los comicios de 2004. El Ejecutivo reconoció en aquellas respuesta parlamentaria que subsistían "importantes vacíos y carencias" que hacían necesario profundizar en "la vía de las reformas democratizadoras y modernizadoras". A finales de mayo, semanas después de las elecciones, el PSOE sí había denunciado en un comunicado que los comicios no reflejaban "en absoluto la realidad plural del país".

ABC