Londres, 24 feb
(EFE).- Las autoridades guineoecuatorianas detuvieron y torturaron a ciento de
personas, entre las que había menores de edad, según el informe anual de 2016
de Amnistía Internacional (AI).
La organización
defensora de los derechos humanos con sede en Londres afirma que ”cientos de
personas, entre las que había menores de edad, fueron detenidas
arbitrariamente, recluidas y golpeadas tras los disturbios que se produjeron
con motivo del torneo de fútbol Copa Africana de Naciones” en enero de 2015.
AI, que denuncia que ”oponentes políticos fueron desterrados y confinados en sus pueblos de origen”, dice que el Gobierno de Malabo ”reprimió el derecho a la libertad de expresión y de reunión, y la Policía usó fuerza excesiva para dispersar manifestaciones pacíficas”.
La ONG acusa al presidente de Guinea Ecuatorial, Teodoro Obiang, de no tolerar ”las críticas al gobierno” y recuerda que en enero de 2015, ”varias personas, fueron detenidas arbitrariamente y estuvieron recluidas durante más de dos semanas por criticar la celebración en el país de la Copa Africana de Naciones”.
AI, que denuncia que ”oponentes políticos fueron desterrados y confinados en sus pueblos de origen”, dice que el Gobierno de Malabo ”reprimió el derecho a la libertad de expresión y de reunión, y la Policía usó fuerza excesiva para dispersar manifestaciones pacíficas”.
La ONG acusa al presidente de Guinea Ecuatorial, Teodoro Obiang, de no tolerar ”las críticas al gobierno” y recuerda que en enero de 2015, ”varias personas, fueron detenidas arbitrariamente y estuvieron recluidas durante más de dos semanas por criticar la celebración en el país de la Copa Africana de Naciones”.
Señala el informe que
el 19 de febrero de 2015, Luis Nzo Ondo, miembro del todavía no legalizado
partido Fuerza Demócrata Republicana (FDR), fue detenido y desterrado a su
pueblo por hacer campaña contra la detención ilegal y el destierro del líder de
su partido, Guillermo Nguema Ela.
En el documento, AI
acusa también a la Policía de Bata, región continental, y a la de Malabo, de
practicar en marzo un ”uso excesivo de la fuerza” al dispersar manifestaciones
pacíficas de estudiantes universitarios de protesta por la concesión de becas.
”Muchos estudiantes
fueron detenidos y golpeados en ambas ciudades. Los detenidos en Bata quedaron
en libertad sin cargos al día siguiente”, según la organización defensora de
Derechos Humanos.
AI, sostiene que ”en
Malabo, la Policía llevó a cabo detenciones arbitrarias y golpeó a estudiantes
y a otras personas sospechosas de serlo, tanto en las calles como en sus
casas”.
”Un niños de 13 años fue detenido en la calle cuando grababa con su teléfono
móvil a la Policía mientras detenía y golpeaba a estudiantes y entraba por la
fuerza en sus viviendas”, lamenta la AI.
Agrega también que
”al menos 50 estudiantes estuvieron varios meses detenidos antes de quedar en
libertad sin cargos” y destaca que ”el niño de 13 años y otros cinco jóvenes
permanecieron bajo custodia policial durante otra semana antes de quedar en
libertad sin cargos”. EFE