MANIFIESTO SOBRE LAS
VIOLENCIAS EN LA REPÚBLICA DE GUINEA ECUATORTIAL
En África, 15 de julio de
2014
A
las violencias, violencias y más
violencias, lote cotidiano en la República de Guinea Ecuatorial, nosotros
decimos BASTA YA.
A
esas violencias, cuya génesis se protagonizó por aquellos que, cobijados bajo el abanico de su volumen
demográfico, sustituyendo la ley matriz del Estado por sus preceptos consuetudinarios, escribieron con letras de sangre el futuro de
ese país, la República de Guinea Ecuatorial el mes de marzo de 1969, les decimos BASTA YA.
Y
porque esas violencias tienden a perennizarse, pues, tanto los que aun
pretendiendo haberse reconvertidos en demócratas, porque
arrepentidos así como los que se mantienen en sus treces al respecto,
siguen atizando la dinámica de DOMINANTES y DOMINADOS en el seno del Estado, les decimos BASTA.
Y
porque por orgullo, mientras que el ORGULLO no es más que un pobre paliativo de la IGNORANCIA, esos ególatras haciendo
caso omiso a la visión y recomendaciones de uno de los iconos del Pueblo NDÔWÉΫE que fue uno de los artífices de la emancipación de Guinea Ecuatorial frente a ESPAÑA, Don Agustín EÑESO ÑEÑE, cuando dijo: “Guinea Ecuatorial, aunque pequeña, será un país próspero como Suiza en
Europa, si trabaja en paz y unidad”, han mellado las vivencias seculares
guineo-africanas con su “unidad nacional/unicidad estatal , les decimos BASTA YA.
Y
porque es evidente que los prepotentes
se afanan para que el problema a resolver sea soslayado, a saber: los
ejes básicos de la convivencia dentro del Estado frente a la disparidad
vigente, términos no unívocos; pues engloban: los Derechos Humanos, la Democracia, las Libertades Fundamentales, principios
como el fin no justifica los medios, conceptos de la Auto-determinación, Soberanía,
Y Legitimidad; los cuales tienen significados diversos y que mal se puede
recuperar los propósitos preestablecidos en la aurora de la independencia
nacional de ese país sin un discurso
común, el CONSENSO,
EN SU CONSECUENCIA:
PRIMERO.-
Porque ningún objetivo político puede justificar las violencias en el seno del
Estado tanto si responden a injusticias como a una provocación, tanto si son
cometidas por el Gobierno o por un Grupo étnico tribal o Asociación política/apolítica,
SEGUNDO.- Porque un mal no puede justificar otro mal y, por tanto, devolver las injusticias constituye un círculo vicioso e indudablemente conduce a la comisión de otras injusticias,
TERCERO.- Porque el mundo no pertenece a los “conquistadores” sino a todos sus habitantes como tampoco la LIBERTAD esta vedada a los “grandes”,
SEGUNDO.- Porque un mal no puede justificar otro mal y, por tanto, devolver las injusticias constituye un círculo vicioso e indudablemente conduce a la comisión de otras injusticias,
TERCERO.- Porque el mundo no pertenece a los “conquistadores” sino a todos sus habitantes como tampoco la LIBERTAD esta vedada a los “grandes”,
CUARTO.-
Porque en este mundo es más meritorio, noble y
magnifico gobernar a hombres libres que no dominar sobre esclavos
y, por tanto, como lo dijo aquél: “en este mundo la perfección no depende de
una sola opinión, los gustos son tantos como rostros”; y precisamente, la legalidad como la legitimidad mas
perfecta solo se consigue dentro de as normas;
y por consiguiente, restablecer los DERECHOS de los todos los Pueblos que configuran la realidad natural y la historia de Guinea
como país, Nación y Estado es la única razón con capacidad de otorgar la legitimidad soberana a cualquier
Gobierno en ese país,
QUINTO.- Porque la DEMOCRACIA es el celo por aliviar a los Pueblos frente a la CUESTION SOCIAL y no la imposición amputando de manera muy despótica una gran porción de disentir a sus propios conciudadanos,
SEXTO.- Y porque pretender que un “DICTADOR es el que dicta las leyes”, mientras que, en la acepción universal, es aquella persona que sobre pasa sus prerrogativas, esa concepción arcaica es por tanto empecinarse en yerro, es una herejía; pues, “no es la voluntad y la arbitrariedad del Monarca quien hace la ley, y no es la voluntad y la arbitrariedad del Monarca quien hace la ley, sino el Monarca de acuerdo con los gobernados”; precisamente, las leyes nada deben emprender mas allá de lo que es necesario para reprimir los abusos y descartar los peligros, y son VINCULANTES para TODOS.
SEPTIMO.- Y porque la lectura del atlas político en la República de Guinea Ecuatorial, evidencia que la VIGENCIA es consecuente de que la autoridad, la moral, el prestigio, las creencias y la visión del mundo del Estado estén puestos en tela de juicio,
a.- rechazamos toda violencia como solución a la patología social que adolece precisamente al Estado guineo-ecuatoriano.
b.- Porque esas violencias programadas han vuelto a cobrar vidas: CUATRO guineo-ecuatorianos han sido victimas, han caído bajo las balas de un presunto grupo armado procedentes de ninguna parte:
- A las familias, familiares, amigos y conocidos de los asesinados, les presentamos nuestros sinceros pésames por la pérdida de sus seres queridos.
- A las Fuerzas Armadas y de Seguridad nacional de Guinea Ecuatorial, les presentamos nuestros respetos y les aseguramos de nuestro sostén moral de cara a la tragedia que ha causado TRES bajas en sus rangos cuando “cumplían sus deberes de defender la integridad del territorio nacional, velar por la seguridad física de sus conciudadanos y de todos los residentes, así como proteger las haciendas públicas y privadas en el ese país”.
- Exhortamos a las autoridades de turno en ese país y a sus allegados como a los presuntos reconvertidos en demócratas, a que combatan su propia fobia a la democracia, hagan suyas las perspectivas de sus conciudadanos y, consiguientemente, con alteza de mira política hagan saltar de del papel a la vida una de las propuestas de ETÔMBBA É-Á NDÔWÉΫE, recuperado por el PDGE vía CPDS, reflejado en el “MANIFIESTO DE MADRID” del 24 de marzo de 2014. Que esa SENTADA, lo repetimos, porque SUPREMA, tenga carácter nacional y no partisana y, de hecho, su perímetro sea el oligopolio de los ESLABONES del Estado de Guinea Ecuatorial y, consiguientemente, las resoluciones resultantes sean VINCULANTES para TODOS: las retahílas y acrónimos, como los que pululan en el espectro político guineo-ecuatoriano -fuera y dentro de ese país-, no tienen propiedades mágicas, no constituyen un antídoto contra la PATOLOGÍA SIOCIAL que adolece al Estado; la sociedad guineo-ecuatoriana está huérfana de legitimidad y la solución es AM.BI.BU.ND.FA.
- Una vez más, exhortamos a las autoridades de turno en ese país, a sus allegados y conniventes, para el futuro de TODOS, a suscribir la máxima que reza: “El que siembra la paz cultiva la PAZ, y su fruto es la JUSTICIA”; liberen entonces a los demás: “el pueblo que libera se libera a si mismo”, dijo el líder independista e icono del Pueblo NDÔWÉΫE, Don NDJÉÉ-Saturnino IBONGO IYANGA.
Y porque en una República, el Poder no se transmite por PROCURACIÓN, a la Comunidad Internacional le recordamos que la sangre que corre en las venas de los centro-africanos, malianos, tunesianos, ukrenianos, sirios, palestinos, egipcios y somalianos, tiene el mismo color que la que corre en las venas de los guineo-ecuatorianos; por lo tanto, su comportamiento tibio frente al drama que es victima el Pueblo NDÔWÉΫE y, por extensión, todos los Pueblos excluidos en la República de Guinea Ecuatorial dentro de sus propios territorios y parcelas ancestrales, tiende al “silencio del que n o dice nada pero que otorga”.
Y porque el DERECHO es el postulado de la libertad práctica, inherente a toda persona humana, apelamos a la ONU, esa Organización que Saturnino IBONGO IYANGA denomino: “la Organización de la gran esperanza”: nosotros ya no aceptaremos ni remiendos ni lavados de cara; sabemos lo que queremos, cómo lo queremos, dónde lo queremos y cuándo lo queremos. Lo que hagan los demás por y para nosotros, mientras estamos ausentes, pues excluidos, decimos que se hace contra nosotros. Y el mero hecho de que no truenen los cañones en ese país, no supone que haya paz en el mismo. Y el desarrollo de una sociedad no se evalúa por el número de sus infraestructuras, instituciones y partido políticos existentes en ese país, sino por la promoción y protección de sus recursos humanos: “cada individuo, cada grupo, cada asociación tiene el derecho de ser diferente, de comportase de manera diferente y de ser percibid como tal”. Y ¡no hay camino para la paz, la PAZ es el CAMINO!
QUINTO.- Porque la DEMOCRACIA es el celo por aliviar a los Pueblos frente a la CUESTION SOCIAL y no la imposición amputando de manera muy despótica una gran porción de disentir a sus propios conciudadanos,
SEXTO.- Y porque pretender que un “DICTADOR es el que dicta las leyes”, mientras que, en la acepción universal, es aquella persona que sobre pasa sus prerrogativas, esa concepción arcaica es por tanto empecinarse en yerro, es una herejía; pues, “no es la voluntad y la arbitrariedad del Monarca quien hace la ley, y no es la voluntad y la arbitrariedad del Monarca quien hace la ley, sino el Monarca de acuerdo con los gobernados”; precisamente, las leyes nada deben emprender mas allá de lo que es necesario para reprimir los abusos y descartar los peligros, y son VINCULANTES para TODOS.
SEPTIMO.- Y porque la lectura del atlas político en la República de Guinea Ecuatorial, evidencia que la VIGENCIA es consecuente de que la autoridad, la moral, el prestigio, las creencias y la visión del mundo del Estado estén puestos en tela de juicio,
Nosotros, NDÔWÉΫE NY-À GUINEA É ÁFRIKA,
a.- rechazamos toda violencia como solución a la patología social que adolece precisamente al Estado guineo-ecuatoriano.
b.- Porque esas violencias programadas han vuelto a cobrar vidas: CUATRO guineo-ecuatorianos han sido victimas, han caído bajo las balas de un presunto grupo armado procedentes de ninguna parte:
- A las familias, familiares, amigos y conocidos de los asesinados, les presentamos nuestros sinceros pésames por la pérdida de sus seres queridos.
- A las Fuerzas Armadas y de Seguridad nacional de Guinea Ecuatorial, les presentamos nuestros respetos y les aseguramos de nuestro sostén moral de cara a la tragedia que ha causado TRES bajas en sus rangos cuando “cumplían sus deberes de defender la integridad del territorio nacional, velar por la seguridad física de sus conciudadanos y de todos los residentes, así como proteger las haciendas públicas y privadas en el ese país”.
- Exhortamos a las autoridades de turno en ese país y a sus allegados como a los presuntos reconvertidos en demócratas, a que combatan su propia fobia a la democracia, hagan suyas las perspectivas de sus conciudadanos y, consiguientemente, con alteza de mira política hagan saltar de del papel a la vida una de las propuestas de ETÔMBBA É-Á NDÔWÉΫE, recuperado por el PDGE vía CPDS, reflejado en el “MANIFIESTO DE MADRID” del 24 de marzo de 2014. Que esa SENTADA, lo repetimos, porque SUPREMA, tenga carácter nacional y no partisana y, de hecho, su perímetro sea el oligopolio de los ESLABONES del Estado de Guinea Ecuatorial y, consiguientemente, las resoluciones resultantes sean VINCULANTES para TODOS: las retahílas y acrónimos, como los que pululan en el espectro político guineo-ecuatoriano -fuera y dentro de ese país-, no tienen propiedades mágicas, no constituyen un antídoto contra la PATOLOGÍA SIOCIAL que adolece al Estado; la sociedad guineo-ecuatoriana está huérfana de legitimidad y la solución es AM.BI.BU.ND.FA.
- Una vez más, exhortamos a las autoridades de turno en ese país, a sus allegados y conniventes, para el futuro de TODOS, a suscribir la máxima que reza: “El que siembra la paz cultiva la PAZ, y su fruto es la JUSTICIA”; liberen entonces a los demás: “el pueblo que libera se libera a si mismo”, dijo el líder independista e icono del Pueblo NDÔWÉΫE, Don NDJÉÉ-Saturnino IBONGO IYANGA.
Y porque en una República, el Poder no se transmite por PROCURACIÓN, a la Comunidad Internacional le recordamos que la sangre que corre en las venas de los centro-africanos, malianos, tunesianos, ukrenianos, sirios, palestinos, egipcios y somalianos, tiene el mismo color que la que corre en las venas de los guineo-ecuatorianos; por lo tanto, su comportamiento tibio frente al drama que es victima el Pueblo NDÔWÉΫE y, por extensión, todos los Pueblos excluidos en la República de Guinea Ecuatorial dentro de sus propios territorios y parcelas ancestrales, tiende al “silencio del que n o dice nada pero que otorga”.
Y porque el DERECHO es el postulado de la libertad práctica, inherente a toda persona humana, apelamos a la ONU, esa Organización que Saturnino IBONGO IYANGA denomino: “la Organización de la gran esperanza”: nosotros ya no aceptaremos ni remiendos ni lavados de cara; sabemos lo que queremos, cómo lo queremos, dónde lo queremos y cuándo lo queremos. Lo que hagan los demás por y para nosotros, mientras estamos ausentes, pues excluidos, decimos que se hace contra nosotros. Y el mero hecho de que no truenen los cañones en ese país, no supone que haya paz en el mismo. Y el desarrollo de una sociedad no se evalúa por el número de sus infraestructuras, instituciones y partido políticos existentes en ese país, sino por la promoción y protección de sus recursos humanos: “cada individuo, cada grupo, cada asociación tiene el derecho de ser diferente, de comportase de manera diferente y de ser percibid como tal”. Y ¡no hay camino para la paz, la PAZ es el CAMINO!
POR LA COORDINACIÓN:
Mahunga mo-a Mongoro
MoŸombo mo-a Ipuwa nah
Konggwé
Bodìyi Ìpo bo-a Motsika
Monyòngo moa Mayumbba
MBOYYI à DÔLE