Terminábamos
la parte II de este artículo diciendo, que por todas estas razones expuestas arriba de indudable
peso y muchas circunstancias puramente guineoecuatorianas que expondré en la
parte III, debía firmarse el Manifiesto de Madrid.
Bien, ahora vamos a exponer esas circunstancias puramente guineoecuatorianas que me
aconsejaron firmar el Manifiesto de Madrid.
UNA: Basándonos en que no había que quedarse a
esperar a que llegase un régimen bueno sino que había que hacerlo, propusimos
el Plan Consensuado de Reconciliación Nacional y Restauración Democrática para
Guinea Ecuatorial en el 2010 y no hubo respuesta. No la hubo porque al
conglomerado de aventajados no les podía interesar habida cuenta de que la
discriminación étnica genera aventajados aunque en diferentes niveles; donde
los mayores beneficiarios de la tiranía de Guinea Ecuatorial son los Obiang
Nguema ya que los familiares de segunda línea ven mermadas sus ventajas frente
a los Obiang o los Nguema de primera línea. Los del clan de Akoa-Kam gozan de
menos privilegios en relación a los familiares de segunda línea; los de la
tribu gozan de menos gangas en relación a los del clan; los de la aldea son
discriminados en relación a los de la tribu en el mar revuelto de la tiranía;
los de la etnia Fang son discriminados en relación a los de la tribu y
finalmente, las otras etnias son discriminadas frente a la etnia Fang. Todo
ello ha generando situaciones de discriminación en cada uno de los niveles,
dependiendo del círculo al que pertenece el individuo. Lo que hace que, las
posiciones claves en todos los aspectos del país las ocupa Obiang Nguema y sus
hijos, y según la proximidad del individuo al núcleo familiar, mayor es la
relevancia de la posición a ocupa. Se coloca a los individuos de acuerdo a su
posición en el seno familiar, y se otorga seguido ventajas al clan, a la tribu
y finalmente a la etnia, mientras se excluye a los que no son de la etnia.
La ventaja que propicia el régimen a
los más desfavorecidos del sistema de aventajados de Obiang Nguema que son los
Fang, es solo frente a las demás etnias que no tienen nada ya que entregar a
excepción de las becas de estudios en el exterior, después de satisfacer la tiranía las necesidades formativas del entorno
familiar, clánico y tribal del dictador. Aún así, eso no permitía que
floreciere una sensibilidad hacia la situación de los discriminados y excluidos
de las otras etnias. Sin embargo,
DOS: Ahora, parece que lo que sucediera con los blancos beneficiaros del
apartheid en Sudáfrica, sensibilizándose con los negros por la injusticia del
sistema, está dándose en Guinea Ecuatorial. Pues como dijimos en la parte I de
este artículo, la formación política
CPDS cuya ejecutiva está compuesta sólo de personas de la etnia Fang, denunció
el año pasado que las etnias
minoritarias son discriminadas en Guinea Ecuatorial. Lo que indica que
después de mucho tiempo, al final las denuncias de las etnias minoritarias
podrían estar calando, ya que la denuncia del CPDS pudo haber producido
movimientos en la gran base de la estructura donde descansa la dictadura de los
Obiang Nguema ya que,
TRES: Además del CPDS, hay muchas personas de la etnia Fang que han entendido que
la tiranía de los Obiang utiliza la discriminación contra las etnias
minoritarias para mantenerse, dando migajas no deseadas por ellos al grueso
Pueblo Fang. Ahora una parte de ese Pueblo Fang ya muestra signos de
sensibilización por la injusticia de la discriminación y solidariza con esas
minorías. Véase por ejemplo la firma del Manifiesto de Madrid, fue firmada por
muchas personas de la etnia Fang, sabiendo que el fin de la tiranía traerá
Democracia que quiere decir, Justicia e igualdad entre los Pueblos de Guinea
Ecuatorial.
CUATRO: Desde el año 2010, los Ndowé hemos presentado varias iniciativas para
acabar con la tiranía de los Obiang Nguema en Guinea Ecuatorial y todas esas
iniciativas requerían:
a.- Una sentada de todos para hablar,
b.- Reconciliación y
c.- Consenso para restaurar una democracia en Guinea Ecuatorial.
No se nos hizo caso durante mucho
tiempo y se creó CEIBA, que requiere:
I.- Una sentada de los Pueblos y Ciudadanos para hablar.
II.- Reconciliación y,
III.- Consensuar para refundar un nuevo Estado que no discrimine a nadie.
Durante estos casi cuatro años, hemos
ido viendo que las conciencias contra la discriminación étnica han ido
creciendo, aunque no se hayan adherido todos a CEIBA. Sin embargo, ahora el
CPDS presenta una iniciativa similar a la nuestra que requiere:
A.- Una sentada INCLUYENTE de todos para hablar,
B.- Reconciliación y,
C.- Consenso para restaurar una democracia en Guinea Ecuatorial.
Aparentemente hay una diferencia en las dos iniciativas entre las palabras; “todos” e “incluyente”. Pero, ambas palabras quieren decir lo mismo.
Aparentemente hay una diferencia en las dos iniciativas entre las palabras; “todos” e “incluyente”. Pero, ambas palabras quieren decir lo mismo.
CINCO: Guinea Ecuatorial es un país constituido por 4 diferentes naciones y 5
pueblos dispares. Sin embargo, esa realidad se ha ocultado durante 44 años para
justificar la discriminación y la exclusión de los otros Pueblos en la
gobernabilidad del país, aludiendo que éramos un Pueblo. Mi atrevimiento según
algunos, a decir públicamente en el año 2010 que no éramos un Pueblo y denunciar
que el mwadjangnismo era el sostén de la dictadura y la discriminación, me ha
costado insultos, incluso a mis antepasados, descalificaciones personales de
todo tipo. Ahora, muchas personas de la etnia Fang admiten y reconocen que
somos pueblos distintos y dispares y que cada Pueblo tiene su propio
territorio. La idea de Federación está cada vez más aceptada como solución de
Guinea Ecuatorial.
SEIS: Lo más importante a mi juicio, el mwadjangnismo o, complejo del moadjang como lo llamó un sabio Fang; el terrible arma de la dictadura y elemento base de la discordia y alejamiento de nuestros pueblos está desvaneciendo, porque ahora, ya se dan muchos casos en los que personas Fang se posicionan de lado de personas Ndowé si creen que el Ndowé tiene razón; cosa que el mwadjangnismo impedía. Esto sin duda alguna conllevará a la recuperación de la confianza tan dañada entre nuestros pueblos y si a todo esto, le sumo que creo firmemente que la iniciativa del CPDS es similar a todas las que hemos propuesto y está en línea con el espíritu de CEIBA, auguro que agrupará esa fuerza de todos capaz de llevarnos hacia la LIBERTAD Y LA IGUALDAD.
A mi juicio, cuando se dan este cúmulo de circunstancias descritas arriba, es favorable el entendimiento, la convergencia y el consenso. En consecuencia, había que firmar el Manifiesto. Para mí, los que lo firmaron son aquellos que rechazan las migajas de la dictadura. Para mí, son los que quieren hacer lo que hicieron los alemanes y los sudafricanos blancos; tomar conciencia de la situación de las víctimas de la discriminación y la exclusión, solidarizar con ellos y participar del lado de los damnificados en la lucha por la ausencia de LIBERTAD Y LA IGUALDAD; principales armas de la dictadura. Por ello firmé el Manifiesto de Madrid, condicionando nuestra presencia a que el dictador pidiera perdón a nuestros Pueblos y estos lo perdonasen. Asumo ese hecho desde mi RESPONSABILIDAD Y MI LIBERTAD.
SEIS: Lo más importante a mi juicio, el mwadjangnismo o, complejo del moadjang como lo llamó un sabio Fang; el terrible arma de la dictadura y elemento base de la discordia y alejamiento de nuestros pueblos está desvaneciendo, porque ahora, ya se dan muchos casos en los que personas Fang se posicionan de lado de personas Ndowé si creen que el Ndowé tiene razón; cosa que el mwadjangnismo impedía. Esto sin duda alguna conllevará a la recuperación de la confianza tan dañada entre nuestros pueblos y si a todo esto, le sumo que creo firmemente que la iniciativa del CPDS es similar a todas las que hemos propuesto y está en línea con el espíritu de CEIBA, auguro que agrupará esa fuerza de todos capaz de llevarnos hacia la LIBERTAD Y LA IGUALDAD.
A mi juicio, cuando se dan este cúmulo de circunstancias descritas arriba, es favorable el entendimiento, la convergencia y el consenso. En consecuencia, había que firmar el Manifiesto. Para mí, los que lo firmaron son aquellos que rechazan las migajas de la dictadura. Para mí, son los que quieren hacer lo que hicieron los alemanes y los sudafricanos blancos; tomar conciencia de la situación de las víctimas de la discriminación y la exclusión, solidarizar con ellos y participar del lado de los damnificados en la lucha por la ausencia de LIBERTAD Y LA IGUALDAD; principales armas de la dictadura. Por ello firmé el Manifiesto de Madrid, condicionando nuestra presencia a que el dictador pidiera perdón a nuestros Pueblos y estos lo perdonasen. Asumo ese hecho desde mi RESPONSABILIDAD Y MI LIBERTAD.
Apoyé
la iniciativa porque de ella podría surgir el fin de la tiranía de Guinea
Ecuatorial, la recuperación de la soberanía Nacional, la configuración de
una identidad común guineoecuatoriana que no colisione con nuestras identidades
étnicas, sino las respete, potencie y proteja, porque
sólo así podremos replantar de nuevo nuestra CEIBA símbolo de nuestra
soberanía, bajo cimientos muy sólidos de nuestra plurinacionalidad, diversidad
étnica y SEAMOS UNO EN SU VIGILANCIA, DEFENSA Y PROTECCIÓN, PARA
NUNCA JAMÁS SOLTARLA. Sé también que los mayores beneficiaros de la
dictadura, la familia, el clan, la tribu del tirano y unos pocos Ndowé, Fang,
Bubis y Bissió que comen de su mano se opondrán a cualquier cambio. Si ello
lleva al dictador a no cumplir, evidentemente no habrá sentada; y eso no me
perjudica ni perjudica a ningún firmante del Manifiesto. Todo lo contrario
nos beneficia, porque hemos demostrado que NO TENEMOS AFÁN DE PROTAGONISMO, lo
que nos interesa es el fin de la dictadura y esa voluntad es la que tradujimos
apoyando una iniciativa similar a las nuestras. Contrariamente si el
dictador cumple y hay sentada, tampoco deberá haber reproches hacia aquellos
que trataron de desvirtuar la iniciativa, o demonizar a los firmantes del
Manifiesto de Madrid. Todo lo contrario, deberán tener las puertas abiertas
para adherirse al proceso, porque este requiere de la participación de
TODOS.
Esta es
mi circunstancia muy personal. Será acertada o no, pero es mía. Respeto a los que rechazan el Manifiesto, pero mi consciencia, responsabilidad y coherencia me dictan que "Yo sí volvería a firmar este
Manifiesto de Madrid”.
Rafael Evita Ika
Presidente de Etômbâ â Ndôwé