Fuente: Reporteros sin Fronteras
RSF/IFEX) - 4 enero 2013 - Reporteros sin Fronteras desea volver a
abordar un hecho preocupante que marcó al mundo de la prensa en Guinea
Ecuatorial a finales del año 2012. La organización expresa su profunda
tristeza, su inquietud y sus sospechas; a la vez, se interroga sobre las
circunstancias en que falleció a finales de noviembre el defensor de la
libertad de prensa Manuel Nzé Nsongo.
"La muerte de Manuel Nzé Nsongo es una pérdida innegable para la
comunidad periodística y el sector de la información de Guinea Ecuatorial. Las
circunstancias de su fallecimiento dan lugar a numerosas preguntas y a diversas
interpretaciones, pues hasta el momento es imposible saber con certeza si se
trata de una muerte natural o de un asesinato. En Malabo, no es raro que circulen
entre la población rumores de que fue envenenado, dada la repentina muerte de
opositores al régimen”, declaró Reporteros sin Fronteras.
A finales de noviembre de 2012 Manuel Nzé Nsongo cayó gravemente enfermo horas después de que acudiera a una comida de trabajo con el Ministro de Información, Prensa y Radio, Agustín Nzé Nfumu. Manuel Nzé Nsongo murió dos días después en el hospital de Malabo; sus allegados aseguran que se sintió mal inmediatamente después de la comida y sospechan que fue envenenado. Como no se realizó una autopsia, no existe ninguna prueba que confirme sus sospechas.
A finales de noviembre de 2012 Manuel Nzé Nsongo cayó gravemente enfermo horas después de que acudiera a una comida de trabajo con el Ministro de Información, Prensa y Radio, Agustín Nzé Nfumu. Manuel Nzé Nsongo murió dos días después en el hospital de Malabo; sus allegados aseguran que se sintió mal inmediatamente después de la comida y sospechan que fue envenenado. Como no se realizó una autopsia, no existe ninguna prueba que confirme sus sospechas.
"¿Aún es posible esclarecer este caso? El gobierno debería tomar
una postura públicamente para que desaparezcan definitivamente las sospechas
que pesan sobre él y, si la familia lo pide, emprender una investigación”,
agregó Reporteros sin Fronteras.
Manuel Nzé Nsongo fue Director de Protocolo al servicio del presidente
Teodoro Obiang Nguema durante más de diez años (1979-1991), después, en el
Ministerio de Asuntos Exteriores (1991-1994). Abrazó la causa de una prensa
libre en 1996, luego se convirtió en Presidente de la Asociación de la Prensa
de Guinea Ecuatorial (ASOPGE). En el año 2000 fundó los diarios El Tiempo
y La Opinión; más tarde concibió el proyecto de crear una
estación radiofónica independiente, Radio Solidaridad. Asimismo, presidía la
Red de Periodistas de lucha contra el VIH/SIDA de Guinea Ecuatorial y la
Asociación Guineo Ecuatoriana para el cuidado y la Defensa de las Personas de
Edad Avanzada.
Según uno de sus colegas, Manuel Nzé Nsongo poseía una personalidad atípica. Progresivamente se había acercado a la prensa independiente intentando conservar su cercanía al poder, heredada de la época en que era un hombre de confianza del Jefe de Estado. Pese a algunos desacuerdos con el gobierno y a críticas, debido a la gestión del país, Manuel Nzé Nsongo siempre evitó –se dice en Malabo y entre la comunidad guineo ecuatoriana– la confrontación directa con el entorno del Presidente.
Según uno de sus colegas, Manuel Nzé Nsongo poseía una personalidad atípica. Progresivamente se había acercado a la prensa independiente intentando conservar su cercanía al poder, heredada de la época en que era un hombre de confianza del Jefe de Estado. Pese a algunos desacuerdos con el gobierno y a críticas, debido a la gestión del país, Manuel Nzé Nsongo siempre evitó –se dice en Malabo y entre la comunidad guineo ecuatoriana– la confrontación directa con el entorno del Presidente.
Gobernado con mano de hierro, Guinea Ecuatorial se ubica en el lugar 161
de entre 179 países en la última Clasificación Mundial de la Libertad de Prensa
de Reporteros sin Fronteras.