sábado, 28 de agosto de 2010

"LE ARRANCARON LAS UNAS CON UN ALICATES ANTES DE MATARLO"

El pasado sábado, en una carretera de las afueras de Malabo, un pelotón de fusilamiento ejecutaba a cuatro hombres. Todos ellos habían sido secuestrados en Nigeria en enero pasado a instancias del régimen de Teodoro Obian y trasladados hasta la tristemente famosa cárcel de Black Beach. ¿La acusación? Haber participado en una intentona golpista para derrocar a Teodoro Obiang. Entre ellos se encontraba el funcionario de aduanas Jacinto Micha Obiang Obono, quien, según su hermano, con quien ha hablado GuinGuinBali, fue salvajemente torturado en la cárcel,

De los seis acusados en este juicio, cuatro fueron condenados a muerte y otros dos a 20 años de prisión, según el veredicto, que fue leído por un oficial del Ejército en la televisión pública. Los condenados a la pena capital fueron José Abeso Nsue Nchama, alias Popo, ex capitán de las Fuerzas Terrestres, Manuel Ndong Anseme, ayudante, Jacinto Micha Obiang, aduanero y miembro de la Seguridad presidencial, y Alipio Ndong Asumu.

Los cuatro hombres fueron condenados por ser "criminalmente responsables y autores de los delitos de atentado contra el jefe de Estado y representante del Gobierno, terrorismo y traición", según el citado veredicto.

Los hechos por los que fueron juzgados los acusados tuvieron lugar el 17 de febrero de 2009, cuando un grupo de hombres armados intentaron desembarcar en Malabo para llevar a cabo un ataque contra el Palacio Presidencial, que fue repelido por la seguridad del presidente. En un primer momento, el régimen de Malabo achacó este asalto a los rebeldes nigerianos, pero luego acusó directamente a Faustino Ondo Ebang, ex jefe de la Unión Popular (partido de la oposición) refugiado en España desde 2007, de ser el autor intelectual de dicho intento de golpe de estado.

El presidente del Gobierno de Guinea Ecuatorial en el exilio y principal opositor al régimen de Teodoro Obiang, Severo Moto, asegura que los cuatro condenados a muerte ya han sido ejecutados y que la decisión de ajusticiarles el mismo sábado 21 de agosto, mientras esperaban por el recurso a la sentencia interpuesto por su abogado, partió directamente del propio Obiang.
"El precario aparato judicial de la República guineana está supeditado a las decisiones arbitrarias y caprichosas del dictador, lo que no les exime de su responsabilidad en el dictado de las aberrantes sentencias", ha asegurado Moto. Según la oposición a Obiang en el exilio, el presidente ecuatoguineano llegó a Malabo el viernes 20 y los cuatro condenados fueron fusilados en el camino de Basilé y arrojados a una fosa.

Los opositores citan a fuentes militares ecuatoguineanas y a Gabriel Nse Obiang, hermano de Jacinto Michá Obiang, uno de los condenados, quien habría declarado a personas cercanas que la ejecución tuvo lugar sobre las cinco de la tarde en el citado camino a Basilé.


Severo Moto ha añadido que "es intolerable consentir que un tirano secuestre a ciudadanos guineanos para luego asesinarlos sin ningún pudor y con la complicidad silenciosa de muchos países democráticos. Nadie ha escuchado que se critiquen estos hechos. Ninguna organización ha denunciado esta nueva aberración del sátrapa de Guinea Ecuatorial".

JOSÉ NARANJO

Ha declarado el Presidente de Etomba a Ndowe Rafael Evita Ika: Esto debe ser lo último que haga Obiang Nguema y no porque se arrepienta de ello sino porque asegurarnos que estos brutales y salvajes asesinatos sean los últimos. Esto ha colmado el vaso.

Etomba a Ndowe