En vista de que el pragmatismo es una doctrina filosófica que considera que el único medio de juzgar la verdad de una doctrina moral, social, religiosa o científica, consiste en considerar sus efectos prácticos; la doctrina es un conjunto coherente de enseñanzas o instrucciones; la enseñanza es la transmisión de conocimientos y la instrucción es aquello que marca las condiciones en que se genera algo, podemos afirmar sin lugar a duda que una aproximación pragmática al tema étnico de Guinea Ecuatorial debe consistir en la consideración de sus efectos prácticos. Eso quiere decir, una aproximación de cómo juzgar la verdad del problema étnico y sus consecuencias morales, sociales, religiosas y científicas. Sin embargo, en la aproximación pragmática, el autor de “Aproximación pragmática al tema étnico” no se ha molestado en considerar los efectos prácticos del tema étnico en Guinea Ecuatorial, sin embargo hizo propuestas de solución a una situación no analizada. A mi juicio, antes de proponer una solución pragmática al tema étnico de Guinea Ecuatorial, debe considerarse previamente que el único medio de juzgar la verdad de dicho problema, viene después de desglosar y reconocer sus efectos prácticos.
Nosotros vamos a hacerlo. Los efectos prácticos del tema étnico de Guinea Ecuatorial considerando al pragmatismo como el único medio de juzgar la verdad para entender cómo se ha generado ese problema étnico, nosotros lo hemos llamado “el mwadjangnismo” que se refiere a un síndrome y el autor del artículo “Aproximación pragmática al tema étnico” lo llama “Síndrome del moadjang” (síndrome de hermano) y hemos establecido que dicho síndrome:
1. Es inconsciente.
2.- Es discriminatorio.
3.- Es separatista.
4.- Es excluyente.
5.- A la llamada del mwadjang con o sin razón, otro mwadjang acude a socorrer al mwadjang.
Los efectos prácticos del desarrollo así como la aplicación del mwadjangnismo o síndrome del moadjang son:
I.- Efectivamente como lo ha descrito D. Fernando Abaga Edjang en su artículo “Aproximación pragmática al tema étnico”, “es un sentimiento tan natural y profundo que ni siquiera nos damos cuenta de él, es como un acto reflejo. Se trata de un concepto claramente excluyente que, unido al “Biloplobo” (los que hablan con sonidos inteligibles) reduce a las demás etnias a la categoría de extranjeros en su propio país o de ciudadanos de segunda clase. Precisamente, cuando un Fang dirime una cuestión entre un Fang y uno de otra etnia, es posible que solo preste atención a su “Moadjang”. No hay que jugar con la dignidad de las personas, es la última frontera. Esta práctica excluyente se extiende a otros ámbitos, como el de empleo y puede darse hasta en la democracia.” Aquí, habría que hacer una matización a la última parte de la aportación del autor: Cuando él dice dudosamente “y puede darse hasta en la democracia”, hay que afirmar que el mwadjangnismo se ha dado y ha impedido el desarrollo de la democracia en Guinea Ecuatorial. Véanse los 44 años de brutal y salvaje tiranía en el país, que no habrían sido posible sin el sostén del mwadjangnismo o síndrome del moadjang.
II.- El mwadjangnismo o síndrome del moadjang se ha desarrollado salvajemente y se ha manifestado con muchísima violencia y eso, ha derivado en el síndrome de Estocolmo desarrollado por los demás pueblos de Guinea Ecuatorial. Véase, “el plan de exterminio contra el Pueblo Ndowe”, no habría sido posible sin el apoyo del mwadjangnismo o síndrome del moadjang.
III.- El mwadjangnismo o síndrome del moadjang ha favorecido la discriminación de la que hemos sido objeto los otros pueblos del país.
IV.- El mwadjangnismo o síndrome del moadjang ha favorecido y es el sostén de la exclusión de los otros pueblos de Guinea Ecuatorial en lo laboral, económico, social y político.
V.- El mwadjangnismo o síndrome del moadjang ha sido y es el sostén de la dictadura y la tiranía de Guinea Ecuatorial, al responder los Fang socorriendo con o sin razón a la llamada del mwadjang Teodoro Obiang Nguema Mbasogo, incluso al coste de miles de vidas de personas fang.
Ahora sí, una vez detectadas una serie de factores que están contribuyendo a la situación actual y dado que todo análisis debe arrojar un resultado, así como recomendaciones que son las soluciones, es cuando tienen que reconocer los Fang como dice Abaga Edjang: los Fang tienen ya muchas ventajas por ser mayor en número, sumado “el síndrome de moadjang” descrito arriba, es pues el problema que impide resolver todos los incovenientes resultantes de la distribución étnical; es la barrera que impide la introducción de la democracia en Guinea Ecuatorial. Si no se supera este enigma, es imposible una democracia en nuestro país dado que, como el mismo autor afirma en su artículo, “El Síndrome de Moadjang” (hermano). Es un sentimiento tan natural y profundo que ni siquiera se dan cuenta de él, es como un acto reflejo y es reflejo”, esto indica que escapa a su control y “reduce a las demás etnias a la categoría de extranjeros en su propio país o de ciudadanos de segunda clase.”
Si el autor de “Aproximación pragmática al tema étnico” afirma acertadamente: “Precisamente, cuando un Fang dirime una cuestión entre un Fang y uno de otra etnia, es posible que solo preste atención a su “Moadjang”, pregunto seguido ¿cómo puede contradecirse afirmando seguido que el problema de Guinea Ecuatorial no es étnico? Solo una respuesta cabe a esa pregunta y es que algo le ha impedido ser objetivo. O sea, no tocar en ningún momento de su análisis los efectos practicos del mwadjangnismo o síndrome del moadjang que es el problema de Guinea Ecuatorial, sin embargo, resaltar este síndrome como una de las soluciones proponiendo que: “Tenemos que reconocer nosotros los Fang que, siendo mayoría, lo que ya ofrece muchas ventajas, padecemos también lo que yo llamaría “El Síndrome de Moadjang””, acompañada de otras medidas complementarias acordes a su análisis; soluciones que no contemplan la sentada de los Pueblos, el perdón y la reconciliación, porque ha ignorado los efectos prácticos que son el daño causado por el mwadjangnismo o sindrome del moadjang a los otros pueblos durante 44 años. Eso, me parece que no puede ser un análisis pragmático.
Aquí, el problema principal está en el mwadjangnismo o síndrome del moadjang, que hemos denunciado en todas las formas y es de reconocer la valía del Ser. Fernando Abaga Edjang por mencionar ese síndrome aunque lo haya colocado en una posición irrelevante, cuando es el problema primordial ya que bajo ese síndrome, es imposible una democracia en Guinea Ecuatorial y si esto así, y ese síndrome solo existe en los fang, claro que el problema de Guinea Ecuatorial es:
PRIMERO: El mwadjangnismo o síndrome del moadjang, que es inconsciente, es discriminatorio y es excluyente.
SEGUNDO: El síndrome de Estocolmo desarrollado por la mayoría de las personas Ndowe en mayor medida, seguido de Bissió, los Ambo y los Bubis, como consecuencia de la violencia de las manifestaciones del mwadjangnismo o síndrome Fang del moadjang.
Concluyendo, creo que tanto el mwadjangnismo- síndrome del moadjang como el síndrome de Estocolmo desarrollado por los demás pueblos de Guinea Ecuatorial, son el mal de nuestro país y tiene solución. La solución estriba en que teniendo todos esos elementos en conciencia, sentar a nuestros pueblos, perdonarnos para que por un lado curemos a los Fang del mwadjangnismo o síndrome del moadjang y por otro lado curar el mal de Estocolmo desarrollado por los otros pueblos, con ello restaurar la confianza y la concordia tan dañadas en estos 44 años entre nuestros pueblos. Seguido, echar al tirano de nuestras vidas y finalmente, refundar el Estado. Si se hace tal cual pretende el autor de “Aproximación pragmática al tema étnico” con sus milagrosas fórmulas, estas no servirán para nada ya que él mismo afirma en su escrito: “el síndrome del moadjang, es un sentimiento tan natural y profundo que ni siquiera nos damos cuenta de él, es como un acto reflejo.” Y si eso es así, quiere decir que escapa al control de ellos, por lo tanto, no es voluntario ni es una acción maliciosa, simplemente es una enfermedad que si no se le da la cura adecuada, los otros pueblos Ndowe, Bubis, Ambo y Bissió estaríamos condenados eternamente a ser discriminados, excluidos y sojuzgados por el mwadjangnismo o síndrome del moadjang en Guinea Ecuatorial. Por ello hablamos de la sentada de los pueblos, para que curemos los males de nuestra nación.
Un análisis que no considere los efectos prácticos de una cuestión, no puede ser pragmático. Tampoco puede arrojar resultados sobre puntos que se han ignorado como ha pretendido hacer el autor de “Aproximación pragmática al tema étnico”, haciendo recomendaciones sobre el tema étnico en Guinea Ecuatorial, mientras en su análisis ha evitado a toda costa considerar los efectos prácticos del tema étnico.
1. Es inconsciente.
2.- Es discriminatorio.
3.- Es separatista.
4.- Es excluyente.
5.- A la llamada del mwadjang con o sin razón, otro mwadjang acude a socorrer al mwadjang.
Los efectos prácticos del desarrollo así como la aplicación del mwadjangnismo o síndrome del moadjang son:
I.- Efectivamente como lo ha descrito D. Fernando Abaga Edjang en su artículo “Aproximación pragmática al tema étnico”, “es un sentimiento tan natural y profundo que ni siquiera nos damos cuenta de él, es como un acto reflejo. Se trata de un concepto claramente excluyente que, unido al “Biloplobo” (los que hablan con sonidos inteligibles) reduce a las demás etnias a la categoría de extranjeros en su propio país o de ciudadanos de segunda clase. Precisamente, cuando un Fang dirime una cuestión entre un Fang y uno de otra etnia, es posible que solo preste atención a su “Moadjang”. No hay que jugar con la dignidad de las personas, es la última frontera. Esta práctica excluyente se extiende a otros ámbitos, como el de empleo y puede darse hasta en la democracia.” Aquí, habría que hacer una matización a la última parte de la aportación del autor: Cuando él dice dudosamente “y puede darse hasta en la democracia”, hay que afirmar que el mwadjangnismo se ha dado y ha impedido el desarrollo de la democracia en Guinea Ecuatorial. Véanse los 44 años de brutal y salvaje tiranía en el país, que no habrían sido posible sin el sostén del mwadjangnismo o síndrome del moadjang.
II.- El mwadjangnismo o síndrome del moadjang se ha desarrollado salvajemente y se ha manifestado con muchísima violencia y eso, ha derivado en el síndrome de Estocolmo desarrollado por los demás pueblos de Guinea Ecuatorial. Véase, “el plan de exterminio contra el Pueblo Ndowe”, no habría sido posible sin el apoyo del mwadjangnismo o síndrome del moadjang.
III.- El mwadjangnismo o síndrome del moadjang ha favorecido la discriminación de la que hemos sido objeto los otros pueblos del país.
IV.- El mwadjangnismo o síndrome del moadjang ha favorecido y es el sostén de la exclusión de los otros pueblos de Guinea Ecuatorial en lo laboral, económico, social y político.
V.- El mwadjangnismo o síndrome del moadjang ha sido y es el sostén de la dictadura y la tiranía de Guinea Ecuatorial, al responder los Fang socorriendo con o sin razón a la llamada del mwadjang Teodoro Obiang Nguema Mbasogo, incluso al coste de miles de vidas de personas fang.
Ahora sí, una vez detectadas una serie de factores que están contribuyendo a la situación actual y dado que todo análisis debe arrojar un resultado, así como recomendaciones que son las soluciones, es cuando tienen que reconocer los Fang como dice Abaga Edjang: los Fang tienen ya muchas ventajas por ser mayor en número, sumado “el síndrome de moadjang” descrito arriba, es pues el problema que impide resolver todos los incovenientes resultantes de la distribución étnical; es la barrera que impide la introducción de la democracia en Guinea Ecuatorial. Si no se supera este enigma, es imposible una democracia en nuestro país dado que, como el mismo autor afirma en su artículo, “El Síndrome de Moadjang” (hermano). Es un sentimiento tan natural y profundo que ni siquiera se dan cuenta de él, es como un acto reflejo y es reflejo”, esto indica que escapa a su control y “reduce a las demás etnias a la categoría de extranjeros en su propio país o de ciudadanos de segunda clase.”
Si el autor de “Aproximación pragmática al tema étnico” afirma acertadamente: “Precisamente, cuando un Fang dirime una cuestión entre un Fang y uno de otra etnia, es posible que solo preste atención a su “Moadjang”, pregunto seguido ¿cómo puede contradecirse afirmando seguido que el problema de Guinea Ecuatorial no es étnico? Solo una respuesta cabe a esa pregunta y es que algo le ha impedido ser objetivo. O sea, no tocar en ningún momento de su análisis los efectos practicos del mwadjangnismo o síndrome del moadjang que es el problema de Guinea Ecuatorial, sin embargo, resaltar este síndrome como una de las soluciones proponiendo que: “Tenemos que reconocer nosotros los Fang que, siendo mayoría, lo que ya ofrece muchas ventajas, padecemos también lo que yo llamaría “El Síndrome de Moadjang””, acompañada de otras medidas complementarias acordes a su análisis; soluciones que no contemplan la sentada de los Pueblos, el perdón y la reconciliación, porque ha ignorado los efectos prácticos que son el daño causado por el mwadjangnismo o sindrome del moadjang a los otros pueblos durante 44 años. Eso, me parece que no puede ser un análisis pragmático.
Aquí, el problema principal está en el mwadjangnismo o síndrome del moadjang, que hemos denunciado en todas las formas y es de reconocer la valía del Ser. Fernando Abaga Edjang por mencionar ese síndrome aunque lo haya colocado en una posición irrelevante, cuando es el problema primordial ya que bajo ese síndrome, es imposible una democracia en Guinea Ecuatorial y si esto así, y ese síndrome solo existe en los fang, claro que el problema de Guinea Ecuatorial es:
PRIMERO: El mwadjangnismo o síndrome del moadjang, que es inconsciente, es discriminatorio y es excluyente.
SEGUNDO: El síndrome de Estocolmo desarrollado por la mayoría de las personas Ndowe en mayor medida, seguido de Bissió, los Ambo y los Bubis, como consecuencia de la violencia de las manifestaciones del mwadjangnismo o síndrome Fang del moadjang.
Concluyendo, creo que tanto el mwadjangnismo- síndrome del moadjang como el síndrome de Estocolmo desarrollado por los demás pueblos de Guinea Ecuatorial, son el mal de nuestro país y tiene solución. La solución estriba en que teniendo todos esos elementos en conciencia, sentar a nuestros pueblos, perdonarnos para que por un lado curemos a los Fang del mwadjangnismo o síndrome del moadjang y por otro lado curar el mal de Estocolmo desarrollado por los otros pueblos, con ello restaurar la confianza y la concordia tan dañadas en estos 44 años entre nuestros pueblos. Seguido, echar al tirano de nuestras vidas y finalmente, refundar el Estado. Si se hace tal cual pretende el autor de “Aproximación pragmática al tema étnico” con sus milagrosas fórmulas, estas no servirán para nada ya que él mismo afirma en su escrito: “el síndrome del moadjang, es un sentimiento tan natural y profundo que ni siquiera nos damos cuenta de él, es como un acto reflejo.” Y si eso es así, quiere decir que escapa al control de ellos, por lo tanto, no es voluntario ni es una acción maliciosa, simplemente es una enfermedad que si no se le da la cura adecuada, los otros pueblos Ndowe, Bubis, Ambo y Bissió estaríamos condenados eternamente a ser discriminados, excluidos y sojuzgados por el mwadjangnismo o síndrome del moadjang en Guinea Ecuatorial. Por ello hablamos de la sentada de los pueblos, para que curemos los males de nuestra nación.
Un análisis que no considere los efectos prácticos de una cuestión, no puede ser pragmático. Tampoco puede arrojar resultados sobre puntos que se han ignorado como ha pretendido hacer el autor de “Aproximación pragmática al tema étnico”, haciendo recomendaciones sobre el tema étnico en Guinea Ecuatorial, mientras en su análisis ha evitado a toda costa considerar los efectos prácticos del tema étnico.
Rafael Evita Ika
Presidente de Etomba a Ndowe- Partido del Pueblo Ndowe.
Responsable de la Seguridad y la Supervivencia del Pueblo Ndowé