Guinea Ecuatorial demanda a Francia por violación de soberanía e inmunidad
Isabel Ferrer- La Haya26 SEP 2012
Malabo pretende con su acción ante el Tribunal
Internacional de Justicia que París anule la investigación sobre presunto
desvío de fondos públicos del presidente guineano.
Guinea Ecuatorial ha demandado a Francia ante el Tribunal Internacional de
Justicia (TIJ), máximo órgano judicial de Naciones Unidas, por violación de
soberanía e inmunidad. En concreto, pide que se ordenen a París la anulación de
las investigaciones penales por supuesto desvío de fondos públicos abiertas
contra el presidente guineano, Teodoro Obiang Nguema, y contra su hijo y
vicepresidente segundo, Teodoro Nguema Obiang, apodado Teodorín. Guinea
pide asimismo que quede sin efecto la orden de arresto emitida por los jueces
galos, por el mismo delito, contra Teodorín. La justicia francesa abrió el caso contra los
Obiang después de que la Organización para la Transparencia Internacional
denunciara la supuesta adquisición fraudulenta de bienes galos. El dinero para
los pagos habría sido usurpado en la propia Guinea Ecuatorial. Durante las
investigaciones, se confiscó un edificio en cuyo interior se encontraban
objetos de lujo de dudosa procedencia. La situación dio un vuelco cuando
Teodorín eludió prestar declaración, y fue dictada una orden de arresto
internacional. Entre los investigados en Francia figuran asimismo las familias
del presidente de Congo-Brazzavile y de Gabón.
"La República de Guinea Ecuatorial pide al TIJ que ponga fin a estas violaciones del Derecho Internacional ordenando a Francia que abandone todos estos procedimientos penales”, reza el texto de la demanda, presentada en La Haya, sede del Tribunal. “Asimismo, solicitamos la devolución de las propiedades de la República guineana embargadas en virtud del caso francés”. Olivier Metzner, abogado de la familia Obiang, pretende evitar “la detención de los mandatarios guineanos”. “También que Francia deje de entrometerse en los asuntos internos de Guinea Ecuatorial y devuelva las propiedades embargadas”, ha dicho. Dado que los casos contenciosos de esta naturaleza precisan del acuerdo previo de la partes, el Tribunal Internacional de Justicia solo procederá si Francia acepta su competencia.“Rechazarla supondría un desprecio a la justicia internacional”, según el abogado Metzner.