FASE V- DEL MACABRO PLAN DE EXTERMINIO CONTRA EL PUEBLO NDÔWÉ EN GUINEA ECUATORIAL- “IMPLANTACIÓN DEL SÍNDROME DE ESTOCOLMO, OCUPACIÓN FANG, Y PROCLAMACIÓN DE LA GUINEA ECUATORIAL FANG”
Esta fase "V" del macabro plan de exterminio contra el Pueblo Ndôwé se completó en dos etapas:
a. “ IMPLANTACIÓN DEL SÍNDROME DE ESTOCOLMO, y OCUPACIÓN FANG.
b. “PROCLAMACIÓN DE LA GUINEA ECUATORIAL FANG”.
Estos dos puntos expondremos por separado, porque la gravedad de lo acaecido requiere rigurosidad, y esa rigurosidad exige que la narración que hagamos de los acontecimientos ocurridos sea amplia y no escueta, para que recoja todos y cada uno de los elementos que conduzcan a la comprensión del crimen que se cometió y en la actualidad se está cometiendo contra el Pueblo Ndôwé en Guinea Ecuatorial.
Estos dos puntos expondremos por separado, porque la gravedad de lo acaecido requiere rigurosidad, y esa rigurosidad exige que la narración que hagamos de los acontecimientos ocurridos sea amplia y no escueta, para que recoja todos y cada uno de los elementos que conduzcan a la comprensión del crimen que se cometió y en la actualidad se está cometiendo contra el Pueblo Ndôwé en Guinea Ecuatorial.
a.- “IMPLANTACIÓN DEL SÍNDROME DE ESTOCOLMO, Y OCUPACIÓN FANG”
En la etapa “a” de esta fase, la falsedad y la hipocresía así como la maldad se encarnaba en aquellos cobardes que mencionamos en otra fase ya publicada del macabro de exterminio contra los Ndôwé. Aquellos Fang que habían vivido entre los Ndôwé antes de la Independencia, habían aprendido a trabajar con los Ndôwé, y muchos de ellos, habían aprendido a hablar bastante el Ndôwé. Aquellos que ocultos señalaron a sus jefes Ndôwé con sus propiedades como objetivos, para que fueran secuestrados por los hermanos Fang que llegaban del interior, hacían acto de presencia. Aparecían de repente, parando a los Fang de seguir abusando de sus jefes y de los bienes de estos. Con ello, adquirían apariencia de salvadores de sus antiguos jefes.
La aparición de estos cobardes con tintes de salvadores, discutiendo con sus propios cómplices ante los Ndôwé, para luego adoptar la posición de nuevo dueño y señor, provocó una reacción psíquica en los Ndôwé privados de sus bienes y de libertad, haciendo que muchos Ndôwé respondieran con unos mecanismos de defensa como respuesta a la situación tan agresiva que padecían, actuando en complicidad con quien le tenía a él, a su familia y bienes secuestrados. Se extendió ese mal hasta los extremos que los Ndôwé terminaron incluso ayudando a ese Fang que le hubo señalado como objetivo y que ahora le tenía sumiso y pisoteado, entregando a su hija para que fuese pareja del Fang, y en muchas ocasiones, reportando cualquier intento de de liberación de otro Ndôwé. Al Fang autor de su cautiverio ayudó y colaboró el Ndôwé, para que el Fang alcanzara sus fines mientras los mantenía secuestrados en sus casas y en cautiverio. Eso se ve aún hoy en día en el país Ndôwé, pues muchos son los Ndôwé, que niegan las barbaridades cometidas contra ellos, y en algunos casos las salidas son auto inculpatorias de las coerción de sus libertades, justificándo dichas coerciones de sus libertades como resultado de responder algún Ndôwé en defensa de sus libertades. Era y sigue siendo muy común en núcleos Ndôwé que tras el asesinato de algún familiar por enfrentarse a los militares Fang, la respuesta global de la comunidad Ndôwé fuera y sea inculpando, y haciéndole responsable a la victima de su asesinato, al haberse enfrentado a sus captores y agresores tratando de defender su libertad.
Salir del país se convirtió en objetivo para los Ndôwé para salvar el pellejo, ante tanta brutalidad y represión, pero la dictadura cerró las fronteras, y pese a haber sido desposeídos nuestros bienes y tierras, nos convertimos en rehenes secuestrados en nuestra propia tierra y el mal extendido alcanzaba cotas inimaginables, pues muchos fueron los Ndôwé que simpatizaron con los represores secuestradores de nuestras libertades, y llegaron incluso a denunciar ante los nuevos amos Fang y secuestradores a otros Ndôwé que trataron de abandonar el país, prestando ayuda al sistema represivo. Otros, ante las quejas en círculos íntimos de familias, amigos o conocidos Ndôwé quejándose de la represión, denunciaban ante el opresor a los otros que se quejaban de la situación. Esa reacción es conocida como el “Síndrome de Estocolmo” que se define como: “una reacción psíquica en la cual la víctima de un secuestro, o persona retenida contra su propia voluntad, desarrolla una relación de complicidad con quien la ha secuestrado. En ocasiones, dichas personas secuestradas pueden acabar ayudando a sus captores a alcanzar sus fines o a evadir a la policía.”
Con militares y milicianos Fang por todas partes, barreras de militares y milicianos secuestrando la libertad y despojando a los Ndôwé de su dignidad como humanos, incluso de los productos de su compra diaria para alimentar a sus hijos, esgrimiendo los Fang su capacidad de violencia, con unos Ndôwé reprimidos bajo control de aquellos Fang que les señalaron como objetivos, otros Ndôwé bajo un terrible SHOK resultante del terror por la cantidad de sangre de familiares y amigos vertida por los militares y milicianos Fang de Francisco Macías Nguema, y finalmente los últimos bajo el síndrome de Estocolmo, sumado la masiva afluencia de llegadas de los Fang al ser financiada dichas llegadas por el gobierno Fang de Francisco Macías Nguema, que enviaba camiones al interior del país Fang de coste "cero", para que los Fang vinieran a ocupar las nuevas tierras conquistadas del país Ndôwé según ellos. Con ello la invasión estaba en marcha.
La ocupación estaba teniendo lugar con más Fang violentos y muy agresivos, aquellos Fang que señalaron las propiedades de sus Jefes Ndôwé, ahora eran los nuevos dueños, procedieron a ceder, alquilar vender desordenadamente los bienes de los Ndôwé a los nuevos Fang que llegaban a ritmo vertiginoso. A medida que llegaban, los aptos y criminales eran convertidos en milicianos para más represión y subyugación de los Ndôwé, fueron asentados también con rapidez pasmosa en las propiedades y tierras de los nuevos amos de los territorios Ndôwé. Con ello, llegaba también la re-bautización de lugares y calles de nuestras ciudades con sus nombres Fang, ante un silencio sepulcral de un Pueblo Ndôwé reducido a esclavos, al no ser considerados ni tenidos en cuenta; simplemente eran ignorados.
El país estaba en caos absoluto, el esquizofrénico Francisco Macías Nguema se acercó a los comunistas y sólo productos del área de influencia comunista llegaban al país, y prosiguió la obligatoriedad de que los Ndôwé hablasen Fang, y la técnica utilizada para conseguirlo fue que para poder comprar alimentos, petróleo o cualquier producto de primera necesidad, había que hablar Fang.
Salir del país se convirtió en objetivo para los Ndôwé para salvar el pellejo, ante tanta brutalidad y represión, pero la dictadura cerró las fronteras, y pese a haber sido desposeídos nuestros bienes y tierras, nos convertimos en rehenes secuestrados en nuestra propia tierra y el mal extendido alcanzaba cotas inimaginables, pues muchos fueron los Ndôwé que simpatizaron con los represores secuestradores de nuestras libertades, y llegaron incluso a denunciar ante los nuevos amos Fang y secuestradores a otros Ndôwé que trataron de abandonar el país, prestando ayuda al sistema represivo. Otros, ante las quejas en círculos íntimos de familias, amigos o conocidos Ndôwé quejándose de la represión, denunciaban ante el opresor a los otros que se quejaban de la situación. Esa reacción es conocida como el “Síndrome de Estocolmo” que se define como: “una reacción psíquica en la cual la víctima de un secuestro, o persona retenida contra su propia voluntad, desarrolla una relación de complicidad con quien la ha secuestrado. En ocasiones, dichas personas secuestradas pueden acabar ayudando a sus captores a alcanzar sus fines o a evadir a la policía.”
Con militares y milicianos Fang por todas partes, barreras de militares y milicianos secuestrando la libertad y despojando a los Ndôwé de su dignidad como humanos, incluso de los productos de su compra diaria para alimentar a sus hijos, esgrimiendo los Fang su capacidad de violencia, con unos Ndôwé reprimidos bajo control de aquellos Fang que les señalaron como objetivos, otros Ndôwé bajo un terrible SHOK resultante del terror por la cantidad de sangre de familiares y amigos vertida por los militares y milicianos Fang de Francisco Macías Nguema, y finalmente los últimos bajo el síndrome de Estocolmo, sumado la masiva afluencia de llegadas de los Fang al ser financiada dichas llegadas por el gobierno Fang de Francisco Macías Nguema, que enviaba camiones al interior del país Fang de coste "cero", para que los Fang vinieran a ocupar las nuevas tierras conquistadas del país Ndôwé según ellos. Con ello la invasión estaba en marcha.
La ocupación estaba teniendo lugar con más Fang violentos y muy agresivos, aquellos Fang que señalaron las propiedades de sus Jefes Ndôwé, ahora eran los nuevos dueños, procedieron a ceder, alquilar vender desordenadamente los bienes de los Ndôwé a los nuevos Fang que llegaban a ritmo vertiginoso. A medida que llegaban, los aptos y criminales eran convertidos en milicianos para más represión y subyugación de los Ndôwé, fueron asentados también con rapidez pasmosa en las propiedades y tierras de los nuevos amos de los territorios Ndôwé. Con ello, llegaba también la re-bautización de lugares y calles de nuestras ciudades con sus nombres Fang, ante un silencio sepulcral de un Pueblo Ndôwé reducido a esclavos, al no ser considerados ni tenidos en cuenta; simplemente eran ignorados.
El país estaba en caos absoluto, el esquizofrénico Francisco Macías Nguema se acercó a los comunistas y sólo productos del área de influencia comunista llegaban al país, y prosiguió la obligatoriedad de que los Ndôwé hablasen Fang, y la técnica utilizada para conseguirlo fue que para poder comprar alimentos, petróleo o cualquier producto de primera necesidad, había que hablar Fang.
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El rechazo absoluto del sistema imperante a cualquier signo de educación o cultura, sumado su la falta de conocimientos gramaticales de los mismos Fang de su lengua, impidieron la imposición oficial del habla Fang como lengua oficial en Guinea Ecuatorial. No obstante, prohibido fue hablar español o cualquier otro idioma occidental, nos prohibieron utilizar nuestros nombres cristianos, y nos obligaron a usar nombres tradicionales, mientras rebautizaban nuestras calles, barrios, edificios, plazas con nombres Fang, e impusieron una nueva moneda con nombre Fang "Ekuele" en 1975. Rechazar una mujer Ndôwé una relación deseada por un hombre Fang, era delito de discriminación castigado severamente con pena de cárcel para los progenitores, obligando a la mujeres Ndôwé evitar la cárcel para sus progenitores sometiéndose bajo coacción a la relación con un hombre Fang, y de ese modo la forzada mezcla étnica estaba servida.
La esquizofrenia de Francisco Macías Nguema le hacía cada vez peores jugadas, incapaz de controlarse, fue aconsejado por los suyos que se retirase a descansar un tiempo en su Pueblo Natal Nzagayong-Mongomo, donde permaneció desde 1975 o 1976 hasta el golpe de Estado que tuvo lugar en 1979. Desde 1975-76 Teodoro Obiang Nguema Mbasogo dirigió el país desde la entonces re-bautizada Isla de Macías Nguema Biyogo, hasta que Francisco Macías Nguema en un arrebato de su esquizofrenia, asesinó al hermano de Teodoro Obiang Nguema Mbasogo, desencadenando lo que éste último mal llamó “Golpe de Libertad”, siendo la verdadera razón un acto reflejo de defensa ya que el hijo de Francisco Macías Nguema hubo regresado de Rusia, y los planes de Macías eran sustituir a Teodoro Obiang Nguema Mbasogo como Ministro de defensa por su hijo. Por lo tanto, Teodoro Obiang Nguema Mbasogo era el siguiente objetivo de Francisco Macías Nguema.
Dentro de aquel embrollo se consumó la etapa (a) “IMPLANTACIÓN DEL SÍNDROME DE ESTOCOLMO”, que hasta hoy padece gran parte de la población Ndôwé en Guinea Ecuatorial, y LA OCUPACIÓN FANG del territorio Ndôwé, de la FASE V- DEL MACABRO PLAN DE EXTERMINIO CONTRA EL PUEBLO NDÔWÉ EN GUINEA ECUATORIAL.
La prueba más contundente de cuanto denunciamos está en: LOS COLABORADORES NDÔWÉ CON EL MISMO SISTEMA QUE LES ASFIXIABA Y ASFIXIA, LA ABSOLUTA OCUPACIÓN FANG DE TODOS LOS RINCONES DE LAS CIUDADES Y PUEBLOS NDÔWÉ, Y LOS CONSTANTES Y CONTINUOS ASENTAMIENTOS DESORDENADOS FANG EN TERRITORIO NDÔWÉ, DEJANDO VACÍAS SUS ALDEAS EN EL PAÍS FANG.
Continuará con la etapa (b) “PROCLAMACIÓN DE LA GUINEA ECUATORIAL FANG”-de la FASE V- DEL MACABRO PLAN DE EXTERMINIO CONTRA EL PUEBLO NDÔWÉ EN GUINEA ECUATORIAL.
Rafael Evita Ika
Presidente de Êtômbâ â Ndôwé-Partido del Pueblo Ndôwé
Licenciado en Derecho con Honores