Por Roy Buyer, 16/03/2011
Transcurrido el tiempo considerado justo para la formación, presentación, y puesta en marcha de los Partidos Nacionalistas y habiéndose creado los grupos representativos de las Nacionalidades Bubi, Bisio, Ambo y Ndowé, solo nos falta la creación de la formación representativa del Pueblo Fang y parece ser que aquello que los demás Pueblos de la Guinea Ecuatorial toman con absoluta seriedad, para nuestros hermanos los Fang, es toda una pachanga. Da la impresión de que la problemática que nos ocupa no va con ellos. Da la sensación de que todo cuanto acontece en nuestro amado País está en absoluto orden. No obstante, en la medida en que va transcurriendo el tiempo, cada palo irá aguantando su vela y progresivamente nos iremos desenmascarando. Probablemente tengamos que llegar a la aseverativa conclusión de que el Pueblo Fang de Guinea Ecuatorial, opta por conservar cualquier régimen siempre y cuando en la cúpula de la jefatura del Estado, los integrantes del mismo pertenezcan a su grupo étnico Fang.
De todos modos, si transcurrido el periodo de creación de los Bloques Nacionalista representativos de cada uno de los Pueblos que configuran la Guinea Ecuatorial, nuestros hermanos los Fang no presentaran el suyo, sencilla y llanamente se nos habrá esfumado una de las opciones: La de salvar la Unión. Sí, esa Unión que tantos sacrificios y amarguras nos ha supuesto.
Toda muerte humana es siempre una mala noticia. Pero en el caso concreto de Guinea Ecuatorial, posiblemente, como consecuencia del sofoco provocado por el dolor, tiene otra dimensión y lectura. Que los Fang entre ellos se maten, evidentemente es y será siempre una mala noticia. Pero que los Fang se carguen con absoluta naturalidad a los mejores hijos de la Guinea Ecuatorial y en especial, los mejores hijos de las demás Nacionalidades, es un hecho desacertado, vergonzoso, criticable, el cual no cabe en ninguna cabeza humana modestamente bien amueblada. A pesar de que somos los damnificados, tengo la triste sensación de que la actitud de nuestros hermanos es chulesca, arrogante y de una absoluta carencia de dolor por el mal propiciado y observo todavía más, una contundente ausencia de los propósitos de enmienda. En su día, siempre y cuando consigamos salvar la Unión, deberá realizarse un juicio, aunque simbólico, por todo lo acaecido en las dos dictaduras padecidas por el Pueblo de Guinea Ecuatorial.
En unos meses el PLAN CONSENSUADO DE RECONCILIACIÓN NACIONAL Y RESTAURACIÓN DEMOCRÁTICA PARA GUINEA ECUATORIAL, hará un año desde que se dio a conocer. Estimo que es un tiempo más que suficiente para haberlo leído, releído e incluso conocerlo al dedillo, para entender cuanto nos propone el Plan (magistral). Considero que ya se debería dar un ultimátum a los Fang, por su silencio en lo concerniente a la creación de su Partido Nacionalista. Si ello no se produjera en el plazo acordado, deberían considerarse los demás Pueblos de la Guinea Ecuatorial exonerados del compromiso con el Pueblo Fang por salvar la Unión, iniciándose el proceso que estimemos oportuno en aras a recuperar la soberanía de los Pueblos AMBO, BISSIÓ, BUBI, FERNANDINO Y NDOWÉ, con el pleno conocimiento de que sea cual fuere el proceso, éste en todo momento será irreversible.
Transcurrido el tiempo considerado justo para la formación, presentación, y puesta en marcha de los Partidos Nacionalistas y habiéndose creado los grupos representativos de las Nacionalidades Bubi, Bisio, Ambo y Ndowé, solo nos falta la creación de la formación representativa del Pueblo Fang y parece ser que aquello que los demás Pueblos de la Guinea Ecuatorial toman con absoluta seriedad, para nuestros hermanos los Fang, es toda una pachanga. Da la impresión de que la problemática que nos ocupa no va con ellos. Da la sensación de que todo cuanto acontece en nuestro amado País está en absoluto orden. No obstante, en la medida en que va transcurriendo el tiempo, cada palo irá aguantando su vela y progresivamente nos iremos desenmascarando. Probablemente tengamos que llegar a la aseverativa conclusión de que el Pueblo Fang de Guinea Ecuatorial, opta por conservar cualquier régimen siempre y cuando en la cúpula de la jefatura del Estado, los integrantes del mismo pertenezcan a su grupo étnico Fang.
De todos modos, si transcurrido el periodo de creación de los Bloques Nacionalista representativos de cada uno de los Pueblos que configuran la Guinea Ecuatorial, nuestros hermanos los Fang no presentaran el suyo, sencilla y llanamente se nos habrá esfumado una de las opciones: La de salvar la Unión. Sí, esa Unión que tantos sacrificios y amarguras nos ha supuesto.
Toda muerte humana es siempre una mala noticia. Pero en el caso concreto de Guinea Ecuatorial, posiblemente, como consecuencia del sofoco provocado por el dolor, tiene otra dimensión y lectura. Que los Fang entre ellos se maten, evidentemente es y será siempre una mala noticia. Pero que los Fang se carguen con absoluta naturalidad a los mejores hijos de la Guinea Ecuatorial y en especial, los mejores hijos de las demás Nacionalidades, es un hecho desacertado, vergonzoso, criticable, el cual no cabe en ninguna cabeza humana modestamente bien amueblada. A pesar de que somos los damnificados, tengo la triste sensación de que la actitud de nuestros hermanos es chulesca, arrogante y de una absoluta carencia de dolor por el mal propiciado y observo todavía más, una contundente ausencia de los propósitos de enmienda. En su día, siempre y cuando consigamos salvar la Unión, deberá realizarse un juicio, aunque simbólico, por todo lo acaecido en las dos dictaduras padecidas por el Pueblo de Guinea Ecuatorial.
En unos meses el PLAN CONSENSUADO DE RECONCILIACIÓN NACIONAL Y RESTAURACIÓN DEMOCRÁTICA PARA GUINEA ECUATORIAL, hará un año desde que se dio a conocer. Estimo que es un tiempo más que suficiente para haberlo leído, releído e incluso conocerlo al dedillo, para entender cuanto nos propone el Plan (magistral). Considero que ya se debería dar un ultimátum a los Fang, por su silencio en lo concerniente a la creación de su Partido Nacionalista. Si ello no se produjera en el plazo acordado, deberían considerarse los demás Pueblos de la Guinea Ecuatorial exonerados del compromiso con el Pueblo Fang por salvar la Unión, iniciándose el proceso que estimemos oportuno en aras a recuperar la soberanía de los Pueblos AMBO, BISSIÓ, BUBI, FERNANDINO Y NDOWÉ, con el pleno conocimiento de que sea cual fuere el proceso, éste en todo momento será irreversible.